domingo, 7 de diciembre de 2014

Athletic Gu Gara

Aprovechando las fechas navidadeñas y aprovechando asimismo la caridad que nos empapa, el Athletic se ha vuelto a inmiscuir en otro proyecto musical. Yo no vengo a criticarlo puesto que apenas he escuchado una canción, que si bien no me gusta, no pasa por ser uno de mis estilos, engloba un proyecto solidario y ya eso es síntoma de buen rollo. A lo mejor faltan temas como el archiconocido "We are the lions" que sí parece un himno futbolístico, pero… el Club que se ha apropiado de ese título "gu gara" sigue sin aportar lo que debe copiar de ese título, el poco saber hacer y el poco estilo, sobre todo porque no piensan en el "nosotros somos" y así nos van las cosas.

Hace unos pocos días se abrió la nueva tienda del estadio, ese buque insignia del cual estamos tan orgullosos y que sin embargo, según va pasando los meses, se está quedando en un bloque de hormigón y acero, bonito, pero sin vida, sin alma, como una estatua abandonada a la intemperie. El campo es más cómodo: accesos, baños, asientos, visibilidad, etc., pero como digo, ha perdido carisma. Y la tienda del Athletic, tal y como debiera ser, debiera vender eso, Athletic, no ropa repetida y encorsetada tras una marca que además de no aportar exclusividad alguna, se ha reído del "gure estiloa" diseñándonos ropa fea, cara y de mala calidad, esto último dicho por jugadores de categorías inferiores consultados. Si habéis estado, no notaréis diferencia alguna con la anterior, salvo tamaño, pero aparte de tener poco (apenas hay banderas, y de lo que hay, un modelo o dos), repetido (filas y filas de camisetas y chandals con dos modelos que se repiten) y soso merchandising (diseños de bufandas en azul que parecen la del Atco. de Madrid). Tampoco aprovecha el espacio nuevo ganado al campo. Colocan una cristalera con vistas al precioso estadio y colocan cuatro maniquíes y un cartelito para imposibilitar el sacarse fotos. Si no está abierto el campo para visitarlo y la gente no puede verlo, salvo los socios y los que pagan una carísima entrada para presenciar un partido falto de ambiente -aunque de esto, hablaremos luego-, al menos deja a la gente sacarse una foto ¿qué daño puede hacerle al cesped? ¿Se desgasta? ¿Le roba el alma al campo como a los indios? ¡Pero si ya la ha perdido! En todo caso y siguiendo con el librepensamiento derechista y capitalista, ustedes directivos, podrían aprovechar para cobrar esa foto con un fotógrafo profesional y así pues bueno, salen ganando. Podrían poner un lugar para sacarse fotos en un chroma y despues insertar digitalmente detrás lo que se quisiera, podrían abrir alguna línea de diseño de merchandising a todo esa gente que diseña posters, bufandas y camisetas que hay, aficionada al Athletic de aquí y de fuera, internet hoy da mucho juego (más que el Athletic a veces), podrían volver a saludar a las peñas que vienen de fuera por megafonía, podrían abrir los días festivos para enseñar el campo, días en los cuales escolares, y foráneos se podrían acercar a Bilbao y abrir el campo aun sin que esté abierto el museo y el restaurante. Seguro que currículums de jóvenes sobradamente preparados para hacer de guía no les iban a faltar, incluso podríais pagarles poco, -eso no os lo he dicho yo-. Seguro que el alcalde de Bilbao y hosteleros agradecerían ese gesto porque generaría gente en la calle que consume. Pero no, preferimos abrir lo justo, y al precio que nos interesa, hacer palcos VIP, invitar a nuestros colaboradores y patrocinadores a tomar canapés y gin-tonics, mientras a un padre no le dejáis meter un botellín de agua con el tapón o incluso hacéis oídos sordos a la creación de una auténtica grada o fondo de animación que el campo está pidiendo a gritos porque es mejor criminalizar a quienes la solicitan, englobándola en un mundo ultra del que dista tanto como lo hacéis vosotros de entender de lo que significa gestionar el Athletic.

Mientras todos los estadios que se precien y donde da gusto jugar (Dortmund, Liverpool, Vallecas…) tienen aficiones que no paran de animar, nosotros hemos perdido en menos de un año el famoso espíritu de San Mamés. Parecía que el día del Nápoles íbamos a resurgir y a asentar las bases para el futuro, pero está visto y comprobado que "los días en los que no nos jugamos nada" (gran error de directiva, entrenador, jugadores, prensa y afición) el campo está más silencioso que una acampada de la Asociación de Mimos. ¿De qué hay miedo? ¿De tener que reubicar a cientos de socios en otras localidades? Bueno, la cagada la hicieron ustedes, compénselo con bajada de cuotas o con camisetas Nike que no se van a vender. Pero háganlo ya, no es una solicitud, es una exigencia, y no mía (que soy un tribunero comepipas según la jerga) ni de unos pocos chalados que se desgañitan en el córner de Norte. Es una exigencia en pro de que el fútbol de verdad vuelva a San Mamés, porque el Athletic somos todos, no sólo ustedes, Athletic Gu Gara!